¿Es el momento para recurrir a cuidados de hospicio? 3 preguntas para hacerse

El cuidado de hospicio en el momento óptimo les da a los pacientes el regalo del tiempo. Pueden aceptar su diagnóstico, pasar un tiempo compartiendo recuerdos, despedirse, poner en orden sus asuntos y concentrarse en su calidad de vida hacia el final.

Un cuidado de hospicio óptimo y oportuno también brinda un respiro a los profesionales de asistencia médica, los cuidadores y los familiares que enfrentan crisis, estrés y los desafíos de síntomas cada vez más graves y de determinadas situaciones, a medida que el paciente decae.

¿Es momento de considerar el cuidado de hospicio? Responder estas preguntas puede ayudar:

1. ¿El paciente enfrenta una de estas enfermedades o afecciones que limitan la vida?

Las enfermedades y afecciones más comunes relacionadas con el cuidado de hospicio, según la National Hospice and Palliative Care Organization, son:

  • Cáncer (28 %)
  • Enfermedades cardíacas y circulatorias (19 %)
  • Demencia/Enfermedad de Alzheimer (17 %)
  • Enfermedades respiratorias (11 %)
  • Derrame cerebral (9 %)

Otras afecciones incluyen enfermedad hepática en etapa terminal y enfermedad de los riñones, esclerosis lateral amiotrófica (ELA o enfermedad de Lou Gehrig) y otras enfermedades neurológicas degenerativas.

Clínicos: consulte las pautas de elegibilidad para hospicio específicas para cada enfermedad

2. ¿El paciente o ser querido muestran estos signos de deterioro?

Los siguientes factores son buenos indicadores de que es un buen momento para recurrir a servicios de hospicio.

  • Un médico ha certificado que el paciente tiene seis meses de vida o menos si la afección/enfermedad siguen su curso normal
  • Los tratamientos curativos (medicamentos, quimioterapia, rehabilitación, etc.) ya no son efectivos o generan efectos secundarios que prolongan el sufrimiento, el malestar y el dolor
  • El paciente ha decidido interrumpir estudios, hospitalizaciones y tratamientos a favor del cuidado paliativo
  • El paciente es cada vez más incapaz de llevar a cabo actividades de la vida diaria (higiene personal, vestirse, comer, mantener la continencia, trasladarse)
  • A lo largo de 4-6 meses, el paciente ha sufrido alguno de estos síntomas:
    • Pérdida del 10 % o más de peso corporal
    • Más de 3 hospitalizaciones o visitas a la sala de emergencia
    • Presencia de otras comorbilidades
    • Deterioro en la actividad física
    • Deterioro en el estado de alerta mental/cognición

3. ¿Ha tomado en cuenta los deseos del paciente?

Si el paciente tiene un plan avanzado de cuidados (ACP, en inglés), sus preferencias y tratamiento al final de la vida están claramente definidos y son fáciles de seguir. Esto incluye un testamento de vida, un poder notarial para decisiones de asistencia médica o (en algunos estados) un documento de Five Wishes. Si el paciente ha dejado en claro que se deberían o no se deberían seguir ciertos procedimientos o intervenciones frente a una enfermedad que limita la vida, el equipo de cuidadores de hospicio puede elaborar un plan de cuidados que honre los deseos del paciente y que, a su vez, se concentre en la calidad, no la cantidad, de tiempo que queda.

Si tiene preguntas sobre la pertinencia de los cuidados de hospicio, comuníquese con el departamento de admisiones de su proveedor de hospicio local. El personal debería poder responder sus preguntas o enviar un clínico para evaluar al paciente y reunirse con la familia sin costo alguno. Con la ayuda de esta información, tendrá una mejor idea sobre cuándo es el momento oportuno para recibir cuidados de hospicio.

El hospicio brinda la posibilidad de controlar el cuidado al final de la vida. Inicie la conversación hoy mismo.